Queremos que Chile sea un país en que las familias sean una prioridad. Para esto creemos esencial velar por el cuidado de las relaciones familiares, especialmente en momentos de separación o divorcio de padres, en que los intereses de sus hijos e hijas deben ser lo más importante. Así, llevamos a cabo un trabajo sumamente ético, cuidadoso y respetuoso de todos los involucrados.

Tenemos la convicción de que para determinar el “nuevo orden” familiar, el mejor mecanismo es el PACTO que surge desde los mismos interesados, según sus necesidades y el interés superior de sus hijos e hijas, por lo que proponemos a nuestros clientes que trabajemos juntos en lograr acuerdos pacíficos, dejando el camino judicial como la vía alternativa.